Activos refugio de alto rendimiento
Aquellos que observan los mercados probablemente se han dado cuenta de que el valor del oro ha alcanzado recientemente nuevos máximos y que incluso el Bitcoin (que algunos llaman el oro digital) ha vuelto a repuntar después de meses de caídas. Y esto es una excelente noticia para aquellos que desean invertir en bienes raíces. En esta guía veremos por qué.
Represión financiera, ilusión monetaria y activos refugio
Para comprender lo que está sucediendo en los mercados, es importante considerar que estamos viviendo en una fase de represión financiera. A pesar de que los bancos centrales están subiendo las tasas de interés y, como resultado, el mercado de bonos ofrece rendimientos mucho más altos que hace algunos años, y algunos institutos financieros ofrecen tasas de interés (especialmente para sumas restringidas) que nunca han sido tan altas en la última década, estas tasas siguen siendo inferiores a la tasa de inflación. De hecho, estas son inversiones con tasas (reales) negativas.
Hay quienes caen víctimas de esta ilusión monetaria, la incapacidad de distinguir entre tasas nominales y tasas reales, y por lo tanto, creen que están ganando cuando en realidad están perdiendo. Y hay quienes protegen su patrimonio apostando por activos refugio. En la coyuntura actual, a la que profundizaremos más adelante, la atención de los inversionistas se centra casi exclusivamente en el oro. El metal amarillo ha experimentado una apreciación considerable en el último año, pasando de poco más de $1,620 por onza en noviembre del 22 a más de $2,048 en abril del 23. Durante el mismo período, con una volatilidad mucho mayor, el Bitcoin pasó de $15,757 en noviembre del 22 a $30,506 en abril del 23.
¿Qué son los activos refugio y por qué son importantes para los inversionistas?
Se consideran activos refugio a todos aquellos activos físicos (o productos financieros cuyo valor está vinculado a activos físicos, por ejemplo, un ETF de oro) que conservan su valor incluso en caso de crisis financieras, especialmente en casos de tormentas financieras (choques económicos, recesiones, guerras, etc.).
Esta amplia definición incluye:
• Metales preciosos como el oro, platino y plata
• Materias primas
• Criptomonedas como Bitcoin y Ethereum
• Monedas fuertes como el dólar estadounidense, el yen japonés, el franco suizo y la libra esterlina
• Bonos emitidos por estados y emisores seguros, como el Bund alemán
• Bienes raíces
La principal ventaja ofrecida por los activos de refugio es, por lo tanto, la protección del capital, ya que, como hemos visto, mantienen su valor en condiciones de estrés e incluso tienden a apreciarse en estas situaciones. Y es precisamente la falta de correlación, o más bien la correlación (a menudo) inversa con respecto a otros activos (por ejemplo, cuando caen los mercados de acciones, sube el oro), lo que reduce los riesgos para quienes los poseen en su cartera y hace que la cartera sea más rentable.
Por qué gran parte de los activos refugio ya no ofrecen refugio
En cuanto a las materias primas, en la coyuntura actual, ya no cumplen su función como activos refugio, ya que están retrocediendo después de sus sólidos desempeños debido a la recuperación post-COVID y la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Estos dos eventos llevaron sus valores a máximos nunca antes vistos, insostenibles para la economía real.
En cuanto a las divisas y los bonos, las medidas de los bancos centrales, que han registrado una serie de aumentos de tasas nunca antes vistos para tratar de controlar la inflación, han trastornado por completo el valor de estos activos. Basta con pensar en la relación dólar/euro, que pasó de 0.95 en octubre del 22, con el dólar más fuerte que el euro, a 1.10 en abril del 23, con una inversión en la relación de fuerzas. Mientras tanto, el mercado de bonos en su conjunto ha estado experimentando valores en descenso y rendimientos en alza durante meses, con cada aumento de las tasas, y estos aumentos no parecen haber terminado, ya que la inflación en Estados Unidos y Europa todavía está muy lejos de los niveles considerados aceptables por los propios bancos centrales.
Con gran parte de los activos refugio fuera de juego, como vimos al principio, la atención de los inversores se ha centrado en el oro y el Bitcoin.
Desventajas del Bitcoin y el oro
Aunque se puedan considerar activos refugio en toda regla, los metales preciosos y las criptomonedas presentan desventajas significativas.
El Bitcoin, Ethereum y todas las demás criptomonedas son impredecibles y altamente volátiles, lo que pone a prueba incluso a los inversores más especulativos y puede generar pérdidas significativas para quienes los poseen (basta con pensar en el Bitcoin, que cayó de los $64,000 en noviembre del 21 a menos de $19,000 en junio del 22 y luego se desplomó a menos de $17,000 en noviembre del 22).
En cuanto al oro, siempre se aplica el refrán «Un campo de trigo produce trigo, un kilogramo de oro no produce nada». El metal dorado es, de hecho, improductivo. Poseerlo no genera ningún rendimiento y en una situación de aumento de las tasas de interés para combatir una mayor inflación, esto puede ser muy perjudicial.
¿Existen activos refugio «productivos» y de valor estable?
Afortunadamente, para los inversores, existe al menos una clase de activos refugio que supera las principales limitaciones mencionadas anteriormente. Se trata de los bienes raíces, en particular, el segmento de propiedades generadoras de ingresos, como casas alquiladas a personas que las habitan y pagan un alquiler.
Estos activos refugio, desde el punto de vista del valor, siguen sus propias dinámicas, desvinculadas de las tendencias de otros activos y con una volatilidad limitada, gracias a las correcciones implementadas después de la crisis de 2007-2008 que se originó en el mercado inmobiliario debido a las hipotecas de alto riesgo (subprime).
Además, más allá de las ganancias de capital derivadas del aumento de valor en el mercado, estas propiedades también ofrecen a los inversores una rentabilidad decente a través de los alquileres. Los alquileres tienden a aumentar con el tiempo debido a la inflación. Basta con visitar el sitio web de Opisas en la sección «Invertir en EE. UU.» para encontrar casas que generan un rendimiento neto del 5% al 10% al año, además de su apreciación con el tiempo.
Poseer estos activos brinda a los inversores:
- Protección del capital
- Volatilidad limitada
- Diversificación estratégica
- Alta rentabilidad capaz de superar la inflación actual y la prevista en los próximos meses
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